Queen junto con, el ex componente de los grupos ingleses Bad Company y Free, Paul Rodgers actuaron ayer en el Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid con lleno absoluto. Este concierto forma parte de la gira europea que están realizando para presentar el primer album de la banda, “The Cosmic Rock”, con la voz de Paul Rodgers y que les ha llevado, esta misma semana, a Barcelona y Murcia.

En la web oficial del grupo y Paul Rodgers puedes consultar toda la información sobre su gira europea.
Eran las 21:55 cuando el Palacio de los Deportes de Madrid apagaba sus luces y comenzaba a vislumbrase en la gran pantalla y en la impresionante estructura de luces que acompañaba el escenario, una precipitación de estrellas mezclada con truenos y relámpagos, seguida de una lluvia de meteoritos y planetas. El entorno visual, al que el público no perdía detalle, se rompía con un juego de luces acompañada de los primeros acordes de “Hammer to fall”.
A este éxito de Queen, que cantaron en una versión más corta de lo habitual, le siguieron otros como “Tie your mother down”, “Fat bottomed girls”, “Another Bites the Dust”, “I want it all” y el aclamado “I want to break free”. Estas canciones le sirvieron a Brian May (el guitarrista y líder actual de la banda) para ganarse al público sin haber pronunciado, aún, una palabra.
Con el ambiente exaltado llegó el momento de promocionar alguna canción del nuevo disco, que relajó un poco el ambiente. Se notaba que la gente no había ido a conocer nuevos temas, sino a recordar viejos himnos.
Y llegó el primer momento emotivo de la noche. Paul Rodgers, Roger Taylor y el resto de músicos abandonaron el
escenario, para dejar a Brian May sólo con una guitarra acústica, sentado en una banqueta situada al borde de una pasarela que formaba parte del escenario, y que quedaba rodeada de cientos de seguidores. Desde allí, May, comenzó a chapurrear algunas palabras en castellano y se arrancó a preguntar al público si querían cantarle a Freddy (Mercury). Al unísono el pabellón le cantó “Love of my live”, con Brian May a la guitarra.

Tras esta emotiva canción, que dejó al público y al propio May emocionado, Roger Taylor (batería de Queen) se unió a May y recordaron otra vieja tanda de éxitos como “39’”.
El lucimiento de los originarios componentes de Queen llegó con un brillante sólo de bateria por parte de Roger Taylor y un espectacular sólo de guitarra de Brian May que duró más de 20 minutos y que no dejó al público indiferente.
El concierto llegaba a su fin y con él llegó el segundo gran momento de la noche. Todas las luces se apagaron y en la pantalla apareció Freddy Mercury tocando el piano y cantando “Bohemian Rhapsody”, canción emblemática del grupo y que nadie puede imaginar en voz de otro que no sea Mercury. El Palacio estalló y el público casi afónico, coreo palabra a palabra la canción.
El video que hay a continuación, muestra a Freddy Mercury interpretando “Bohemian Rhapsody” en el legendario concierto de Wembley de 1986.
Después de este himno llegaba el único bis de la noche. “We will rock you”, “All Right Now” (famosa canción de Paul Rodgers con la banda Free) y un “We are the champions” que consiguió lo que ninguna canción había conseguido hasta el momento, levantar a todo el mundo de las gradas.
Así finalizaba un concierto, que duró dos horas y media, en el que Paul Rodgers no defraudó, Brian May se lució, la gente disfrutó y en el que nadie pone en duda (ni el grupo, ni el público) que el líder indiscutible de Queen, fue, es y será Freddy Mercury.
Crónica del concierto de Queen en Barcelona de el periódico La Vanguardia